"La erupción será explosiva si contacta con el mar": los vulcanólogos canarios ven similitud (y diferencias) entre Fagradalsfjall y La Palma

Imagen del volcán de Fagradalsfjall.
Imagen del volcán de Fagradalsfjall.
Getty Images
Imagen del volcán de Fagradalsfjall.

La calma tensa reina en Islandia. El tic tac suena en Grindavik, el pequeño municipio pesquero al oeste del país que se encuentra totalmente vacío desde el pasado viernes, cuando su población tuvo que ser evacuada de emergencia ante una inminente erupción del volcán Fagradalsfjall. Apenas una semana después, la posibilidad de que 'estalle' ya no es inminente. Su actividad sísmica, que desde el 25 de octubre registró más de 30.000 terremotos de magnitud superior a 5, ha descendido de forma notable. No obstante, el riesgo de erupción continúa siendo elevado.

Ante esta situación, la mente, inevitablemente, tiende a recordar Cumbre Vieja y el volcán de La Palma que tan graves consecuencias tuvo. Estalló en septiembre de 2021 y se mantuvo activo casi dos meses. Tras de sí dejó 2.500 edificaciones destruidas, miles de familias sin hogar, cientos de cultivos arrasados y un gran reguero de ceniza. Teniendo en cuenta este reciente precedente, ¿puede suceder lo mismo en Islandia? 

"Depende de la dirección del viento"

"Podría tener un carácter explosivo si contacta con el mar", confiesa a 20minutos Luca D’Auria, director del área de vigilancia volcánica de INVOLCAN (Instituto Volcanológico de Canarias). Esta es la hipótesis que los expertos auguran como "la peor", ya que podría generar "columnas de ceniza volcánica" similares a las que paralizaron el tráfico aéreo en 2010, aunque estas, en principio, no serían "extremadamente violentas". 

También podría darse una "erupción efusiva en la tierra", con coladas que se abrirían paso por el terreno de la península de Reykjanes, al igual que sucedió en Cumbre Vieja, vaticina. Esta situación, no obstante, sería más "tranquila" debido a la menor cantidad de ceniza que se expulsaría. 

En cuanto a los efectos de una hipotética erupción, "es difícil" conocerlos, asegura D'Auria. No obstante, antes de que se haya producido, los daños en las infraestructuras de Grindavik ya ascienden "a varios millones de euros", con grietas en carreteras y edificaciones deterioradas. 

Las cenizas expulsadas también podrían suponer un problema, pues tendrían "un efecto inmediato" sobre el tráfico aéreo, aunque la probabilidad de que esto suceda es baja. Los vecinos, por otra parte, podrían verse afectados por el dióxido de azufre emanado a la atmósfera, aunque esto "depende de la dirección del viento": "Si la pluma volcánica vuela hasta una zona despoblada, no habría contratiempo. Si llega hacia la capital (Reikiavik) podría provocar algunos problemas respiratorios, tal y como sucedió en el Valle de Aridane".

Las señales sísmicas "son muy diferentes"

Uno de los elementos definitorios para saber como puede desarrollarse la actividad volcánica es el contexto geológico de cada zona. El volcán del Monte Vesubio (Italia), por ejemplo, tenía un cráter definido, asegura D'Auria. Sin embargo, en el caso de Grindavik, al igual que ocurrió en La Palma, "no hay un centro concreto de erupción", por lo que la "dificultad" de predicción hace que exista cierta "incertidumbre", pues la lava podría emerger por cualquier lugar. 

Esto se debe a que, tanto La Palma como Islandia, están formados por un "conjunto de volcanes" que no tienen "forma de cono", por lo que  pueden explosionar por fracturas del terreno ciertamente imprevisibles.

Si se tienen en cuenta los movimientos eruptivos, Islandia tiene un amplio historial. Esto viene provocado por su orografía, pues se encuentra "en medio de una dorsal oceánica", lo que hace que su actividad pueda ser relativamente predecible. 

En este lugar la actividad sísmica tiene un "patrón concreto", pues cada "ocho o nueve siglos de tranquilidad" suelen darse "ciclos de actividad seguidos". El último comenzó en 2021 y desde entonces ha habido tres periodos de actividad, por lo que según las estadísticas este podría ser el cuarto. No obstante, esta vez las señales sísmicas "son muy diferentes a las anteriores", confiesa D'Auria. 

Inminente erupción del volcán Fagradalsfjall, en Islandia.
Inminente erupción del volcán Fagradalsfjall, en Islandia.
Carlos Gámez

En las últimas semanas, este pueblo ha experimentado temblores de magnitud superior a 5, con "deformaciones impresionantes" y grietas de varios metros, algo que no había sucedido anteriormente. Algo similar sucedió en La Palma, pues la isla vio como en los días anteriores los 'síntomas' de erupción fueron menores, con sismos "de magnitud 4", y deformaciones de escasos centímetros. 

Sin embargo, en aquel caso "la evolución fue súper rápida" y "cogió por sorpresa a todos los expertos", que vieron como se produjo "una cantidad de ceniza inesperada y sin precedentes". Como consecuencia, no se llevó a cabo ningún plan de contingencia y la población tuvo que ser evacuada tras la erupción. 

En el caso de que finalmente erupcionara, el experto de INVOLCAN asegura que su duración sería "difícil de prever", aunque sus antecedentes indican que podría durar "pocas semanas", tal y como sucedió en La Palma.

A pesar de todas estas elucubraciones e hipotéticos casos, D'Auria afirma que "todavía no es cierto que vayan a darse erupciones": "La probabilidad sigue siendo alta, aunque todo podría acabar en nada, con un fenómeno de intrusión magmática (la lava queda por debajo de la superficie y no llega a erupcionar)", concluye. 

Alejandro Sánchez de la Blanca
Redactor '20minutos'

Graduado en Periodismo por la Universidad Rey Juan Carlos en 2023. Me inicié en algunos medios universitarios escribiendo sobre eventos deportivos. Actualmente escribo en la sección de Última Hora.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento